Tras presentar al panel invitado para participar del encuentro, Susana Gelber fijó la postura de Meretz respecto a la situación en Gaza. Al respecto, destacó la necesidad de avanzar en un acuerdo con la Autoridad Palestina. “Sentimos todo el dolor por tantas muertes y destrucción, pero también sentamos nuestra posición sobre qué pensamos del movimiento Hamás, cuyo objetivo fundacional es la destrucción del Estado de Israel y aniquilar a todos los judíos. Pero no apoyamos al gobierno de Israel, de ultraderecha, que desperdicia todo tipo de oportunidades de llegar a un acuerdo. En esta vuelta de violencia terrible, pensamos que la única solución pasa por un acuerdo global con la Autoridad Palestina, en un marco de negociación internacional, que incluya la desmilitarización con supervisión internacional de Gaza, que debe quedar a cargo de la AP, y con un fuerte impulso al desarrollo de la Franja y el levantamiento del bloqueo”.
Luego se proyectó un video en el que Darío Teitelbaum y Moshé Rozén, quienes viven en kibutzim linderos al límite con Gaza, muy cerca de localidades donde fueron descubiertos túneles de Hamas, expresaron sus pensamientos encontrados entre su ideología pacifista y su vida cotidiana, signada por los ataques que las facciones terroristas perpetran desde la retirada de Israel de la Franja.
“A veces siento que esto se hace irreversible, pero en el fondo pienso que no”, afirmó Teitelbaum sobre el conflicto con los palestinos, tras destacar que “Gaza es la cárcel abierta más grande del mundo”. Por su parte, Rozén describió la situación de la zona limítrofe con la Franja en términos de “sobrevivencia” y manifestó su dolor por la generalizada alineación en contra de Israel. “Es aberrante la omisión a nivel internacional de la criminalidad de Hamas. Los gobiernos latinoamericanos expresaron su solidaridad con las víctimas palestinas, pero no mencionaron nada sobre lo que sufren los argentinos en el sur de Israel”, denunció durante la charla grabada en el epicentro de la actual escalada de violencia.
Discursos binarios de ambos lados
Daniel Colodenco reclamó abrir el discurso sobre el conflicto entre Israel y Hamas a opciones que vayan más allá de la lógica binaria, plagada de maniqueísmos en los que sólo hay lugar para demócratas contra bárbaros o victimarios contra víctimas. También ofreció una mirada de índole social y psicológica sobre la dinámica de las escaladas de violencia como la actual, al analizar que la venganza en Medio Oriente es un motor de conflicto, cuya base radica en no reconocer al otro. Es por eso que el otro se convierte en una negación de la posibilidad de negociar.
“Hay víctimas de los dos lados, que son en última instancia víctimas inocentes de las políticas de sus respectivos mandantes. A esas víctimas hay que tenerlas en cuenta. Esa ética no aparece en ninguno de los discursos binarios, que describen a ‘una democracia que lucha contra la barbarie’ o a ‘Israel como Estado genocida y a Hamás como un ejército del pueblo’. Pero en nuestro patio trasero también tenemos personajes con pensamientos e ideologías que no difieren demasiado de la de Hamas en cuanto a su irredentismo y a su pretensión pre moderna de controlar el mundo a través de la religión”, afirmó Colodenco.
Por su parte, Jorge Schussheim, quien se manifestó muy escéptico sobre las chances de lograr un entendimiento concreto entre israelíes y palestinos, también cuestionó que en el futuro Israel sea al mismo tiempo un Estado judío y democrático. “Si Israel es un Estado judío, no podrá ser jamás un Estado democrático; y si quiere ser un Estado democrático, jamás podrá ser un Estado judío. Y si me pregunto por una solución de dos Estados, con el mismo criterio me veo obligado a preguntarme por qué no un Estado, pero un Estado no judío sino un Estado democrático, árabe-judío, de gente, de personas, no de religiones”, reflexionó.
Pero luego, a modo de cierre, remarcó su postura en un contexto de antagonismos. “Frente a la derecha judía y a la derecha no judía, abogo por la creación de una paz donde los palestinos puedan vivir su propio Estado sin ser sometidos; y frente a la izquierda judía, y la izquierda no judía que está hablando del “sionismo internacional”, me declaro abiertamente pro existencia del Estado de Israel, y si es necesario, sionista”.
Rechazo a la opción de administrar el conflicto
Shlomo Slutzky eligió abordar la actual escalada de violencia y muertes en Gaza desde las vivencias que le tocan padecer como ciudadano de Israel. En ese sentido, narró la experiencia de su hijo Tomer, que fue uno de los primeros en movilizarse a la Plaza Rabin (donde Itzjak Rabin fue asesinado por un extremista judío de derecha) a la manifestación del 26 de julio contra la guerra en Gaza. Fue precisamente en ese momento, cuando Shlomo debió llamarlo para avisarle que su amigo Roí Peles había muerto en batalla, en la Franja. Pese a esta conmovedora noticia, Tomer continuó con su labor como militante pacifista.
El relato de Slutzky prosiguió con la descripción del entierro, multitudinario y con participación de muchos de quienes el día anterior habían dicho presente en la Plaza Rabin; y de la Shivá, la reunión de duelo que se realizó en la casa de los padres de Roí, donde se puso en manifiesto la ideología pacifista del soldado muerto, con un collage de fotos en el que se destacaba una imagen donde él aparecía en una manifestación por la paz sosteniendo un cartel con la leyenda: Basta de bloqueo a Gaza. “Es como si Roí hubiera previsto su propia muerte y hubiera hecho lo posible para evitarla. La suya y la de tantos más, de uno y otro lado de la frontera”, expresó Slutzky.
Luego, el periodista y documentalista hizo un análisis político donde manifestó el rechazo de los sectores progresistas al proyecto de administrar el conflicto, implementado en la práctica por la alianza de derecha que gobierna Israel.
“Cuando decimos que ‘Sólo la paz es revolucionaria en Medio Oriente’, nos referimos a la solución de Dos Estados para dos Pueblos, lo que implica la retirada israelí de Cisjordania y la creación de un Estado Palestino independiente. La responsabilidad en los conflictos es mayor para el más fuerte, por lo que Israel debe hacer más por la solución del conflicto. Cuando se ningunea y debilita a Abu Mazen, y se imponen nuevos obstáculos para llegar a un acuerdo de paz, en realidad el gobierno israelí está actuando en contra de su propia ciudadanía”, destacó Slutzky.
Luego de las exposiciones del panel, hubo un debate entre distintos puntos de vista, y se creó un consenso en torno a que estas actividades son necesarias como parte de un proceso que sirva para entender la complejidad del problema. Entre otros, expresaron su opinión María Volcovich, del Consenso Argentino Pro Paz Palestino-Israelí; Naum Kliksberg, de la red Matrimonios Mixtos; Daniel Marcove y Ricardo Merkin, respectivamente, director y actor de la obra Tierra del Fuego (que aborda el conflicto israelo-palestino); el periodista Guillermo Lipis; y el economista Ricardo Aronskind.
* Periodista.
Invitamos a nuestros lectores a ver los puntos más destacados del encuentro en YouTube.