
Entrevista al escritor Mauricio Rosencof, cuya excepcional historia como rehén de la dictadura uruguaya junto con Pepe Mujica y Eleuterio Fernández Huidobro inspiró el film La noche de 12 años, basado en su libro Memorias del calabozo
Me daban por «tupa», por «bolche», por judío, por existir…
Mauricio “el Ruso” Rosencof es una de aquellas personas entrañables con quien nos gustaría conversar durante largas horas frente a una taza de café, pero como él dijo en off, prefiere hacerlo frente a vasos con bebidas que se toman con hielo. Un ser humano imprescindible en términos de Bertolt Brecht. Extremadamente asequible, querible, sencillo, humilde, inteligente, profundo y optimista. Dueño un mundo interior diverso y rico del cual brota una sabiduría práctica que contagia vida y ganas de vivirla. Un personaje lleno de historias, anécdotas y vivencias de su Montevideo natal, del barrio, familiares y las que generó en su propio derrotero personal. Testigo de la historia contemporánea de América Latina y del pueblo judío. Hijo de inmigrantes europeos escapados del hambre y la persecución. Una familia diezmada durante de la Shoá de la cual solo quedan, como a tantos otros, algunas fotos borrosas blanco y negro como memoria. Idealista, luchador, combatiente y preso político en una larga noche de doce años confinado al cautiverio y aislamiento total. Su lema, resistir, no rendirse frente a la adversidad. Escritor, dramaturgo y poeta uruguayo y judío. Su voz, testimonio vivo. Su ejemplo honra a la vida. Sus textos construyen sentido que emanan de la palabra aguda, dulce y sabia. La utopía, los sueños y los ideales siempre están presentes en él y en sus libros.