Irak:

Chiítas y sunnitas envueltos en ola de atentados a mezquitas

Un grupo de insurgentes hizo estallar bombas dentro de la mezquita Dorada (chiíta) de Samarra, este miércoles 22 de febrero, destruyendo su cúpula dorada. En represalia fueron atacadas más de 90 mezquitas sunnitas. Jalal Talabani, Presidente de Irak, solicitó a los iraquíes que no permitan que el ataque contra la mezquita chiíta de Samarra conduzca al país a una guerra civil. Como no podía ser de otro modo, el Presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, acusó a Estados Unidos e Israel del atentado contra la Mezquita Dorada de Samarra

El presidente de Irak, Jalal Talabani, le pidió a la población que no permitan que el ataque contra una emblemática mezquita chiíta en Samarra arrastre al país a una guerra civil.
Tras este atentado, el conflicto entre estos grupos alcanzó un grado de tensión máxima y ya hay registrados 7 muertos.
«Este nuevo crimen es una advertencia de que hay una conspiración contra los iraquíes para llevarnos a una guerra entre hermanos. No lo permitiremos», dijo Talabani por televisión.
«Nos enfrentamos a una gran conspiración contra Irak, contra su unidad. Debemos trabajar juntos contra la amenaza de una guerra civil devastadora. Es nuestro mayor peligro. Doy gracias a Dios porque ninguna lista consiguiese la mayoría. Este resultado nos fuerza a todos a cooperar para crear un Gobierno de unidad nacional» agregó.
El templo o mezquita Dorada de Samarra es el cuarto templo chiíta más grande e importante de Irak.
El Partido Islámico Iraquí (PII), uno de los más importantes de los árabes sunnitas de Irak, asegura que al menos 29 de sus mezquitas fueron atacadas. «Fueron incendiadas, atacadas y ocupadas, con todo tipo de armas. Además, una de nuestras sedes, en Basora, está cercada», declaró su secretario general, Tarek al Hachemi.
El primer ministro, Ibrahim al Yaafari, chiíta, ha declarado tres días de duelo y pidió la unidad de la población luego de la explosión, en lo que ha calificado de ataque contra todos los musulmanes.
El Presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, ya acusó a Estados Unidos e Israel del atentado de contra la Mezquita Dorada de Samarra, afirmando que era el trabajo de «derrotados sionistas y ocupantes».
Hablando ante una multitud de personas Ahmadineyad se refirió a la destrucción de la mezquita de en Samarra, que el Gobierno iraquí ha atribuido a los insurgentes.
«Invaden el templo y lo bombardean porque se oponen a Dios y a la justicia», dijo Ahmadineyad, en referencia a las fuerzas multinacionales ocupadoras de Irak.
«Estas actividades pasivas son actos de un grupo de derrotados sionistas y ocupantes que intentaron golpear nuestras emociones», continuó. Dirigiéndose a Estados Unidos, añadió, «debén saber que este tipo de actos no los salvarán del odio de las naciones musulmanas».