León Poliakov historiador de la Shoa, antisemitismo, fascismo y nacionalsocialismo

No son pocos los historiadores que han investigado sobre el Holocausto, pero ninguno es tan reconocido en este tema como León Poliakov, además de por sus estudios sobre antisemitismo, fascismo y nacionalsocialismo. “Historia del antisemitismo” es uno de sus trabajos más notables, ya que gracias a los cinco volúmenes de dicho título obtuvo el Premio Edmund Weil en 1960 y el Premio del Judaísmo Francés en 1981.
Por Luis Morgenstern Korenblit

Leon Poliakov nació en una familia burguesa judía rusa en San Petersburgo (25 de noviembre de 1910 – Orsay, 8 de diciembre de 1997). Su padre era editor y publicaba periódicos. Sus padres decidieron emigrar en 1920 para escapar de la revolución bolchevique. Pasaron algunos años en Berlín, donde Poliakov aprendió alemán, antes de establecerse permanentemente en París en 1924. Se instaló definitivamente en París, donde estudió desde 1924 en el Lycée Janson-de-Sailly y luego en la Sorbona Derecho y Letras. Su padre fundó allí el periódico Pariser Tageblatt para la emigración judía-alemana. Léon Poliakov se matricula en Derecho. Se definió entonces como un hombre de triple cultura: rusa, alemana y francesa.

En 1939 se unió al ejército francés como voluntario extranjero. Hecho prisionero tras la debacle, se escapa, obtiene documentos falsos y se une a la Resistencia. En 1941, conoció en Marsella al rabino Shneur Zalman Schneerson, quien dirigía la Asociación de Judíos Practicantes. Se convirtió en su secretario y sobrevivió en parte gracias a documentos falsos, en parte gracias al ejército italiano que ocupó esta zona hasta 1943. Fue durante la guerra, gracias a acontecimientos y reuniones, que hizo que Poliakov, que no había recibido una educación religiosa, tomara conciencia de su judaísmo, en un sentido intelectual, a través de encuentros como los de Jacob Gordin y Alexandre Kojève.

A través del rabino Schneersohn, Poliakov conoció a su primo, Isaac Schneersohn. Originarios de Rusia y establecidos en Francia a principios de los años veinte como Poliakov. Los dos hombres se encontraron por primera vez en 1943. Schneersohn fundó un centro de documentación en Grenoble. Durante la Liberación, Isaac Schneersohn creó el Centro de Documentación Judía Contemporánea (CDJC) en París, y Poliakov comenzó a trabajar allí como jefe del Servicio de Investigación. Cuando el gobierno francés solicitó al CDJC que apoyara el alegato francés en el juicio de Nuremberg, fue Poliakov quien ayudó a Edgard Faure, quien a su vez ayudó al fiscal François de Menthon. Al poner parte de sus archivos a disposición de la delegación francesa que carece de documentación, el CDJC consolida y legitima su actividad. A cambio de esta ayuda, Poliakov y Joseph Billig, otro miembro del CDJC, fueron autorizados a recurrir a los archivos de este primer gran juicio internacional. Poliakov publicaría más tarde para la colección Archivos (Juilliard, 1971) un volumen sobre el proceso de Nuremberg, elaborado a partir de los archivos recopilados tras el proceso y combinando, según el principio de esta colección, documentos y análisis de documentos. Bajo los auspicios del CDJC, publicó sus primeros libros: La condición de los judíos bajo la ocupación italiana en 1946 y La estrella amarilla en 1949, publicados por el CDJC, Éditions du Centre.

Naturalizado francés en 1947, Poliakov comenzó oficialmente su carrera como historiador y publicó su primera obra, el Breviario del odio, basado también en parte en los archivos de los procesos de Nuremberg. Publicado en 1951 por Calmann-Lévy en la colección de Raymond Aron, y gracias a la insistencia de este último, esta obra se considera el primer estudio sobre el exterminio de los judíos en la historiografía francesa. Tras la publicación de esta obra, en la que cuestiona la actitud del Vaticano durante la Shoá, Poliakov se peleó con Isaac Schneersohn y abandonó el CDJC. Pero no dejó de colaborar con el CDJC, en particular a través de artículos publicados en la revista del Centro, Le Monde Juif.

Poliakov fue director de investigaciones del CNRS (Centro Nacional de la Investigación Científica) de 1954 a 1979. Su gran obra es su Historia del antisemitismo, compuesta por cuatro volúmenes publicados entre 1956 y 1977, a los que se añadió un quinto que editó en 1994. En esta obra, rastrea los orígenes del antisemitismo desde la Edad Media hasta el siglo XX, distinguiendo el período de la Ilustración como el del surgimiento del antisemitismo moderno. El segundo volumen, Los banqueros judíos y la Santa Sede, está escrito a partir de su tesis doctoral, defendida en 1967.

Al mismo tiempo, inició una colaboración con Joseph Wulf, un judío polaco que pasó por París antes de establecerse en Berlín, de la que resultó otra obra monumental; la publicación de varios volúmenes sobre la historia del Tercer Reich entre 1955 y 1959: El Tercer Reich y los judíos (1955), El Tercer Reich y sus servidores (1956), El Tercer Reich y sus pensadores (1958). Fue a través de este trabajo conjunto, desarrollado en parte gracias al acceso a las fuentes que le proporcionó Poliakov, que Wulf se convirtió en un historiador de la Shoá, el único entre los supervivientes de esta generación que eligió Alemania para anclar su obra historiográfica. A diferencia del trabajo del CDJC, basado en archivos oficiales procedentes principalmente de los verdugos, Wulf y Poliakov integran “fuentes judías”, y en particular testimonios de las víctimas, en particular sobre dos grupos, los niños y los eruditos. Este enfoque, ajeno a las prácticas del CDJC, parece haber sido inspirado en Wulf por el trabajo de la Comisión Histórica Judía Central, en la que Wulf participó antes de su salida de Polonia. Pero lo encontramos en el trabajo de Poliakov sobre Auschwitz, publicado en la colección Archivos en 1964, que contiene una sección de testimonios, que sugiere que Wulf, y a través de él la historiografía judeo-polaca, pudieron influir en su trabajo.

León Poliakov es reconocido por sus estudios sobre el Holocausto, antisemitismo, fascismo y nacionalsocialismo. No son pocos los historiadores que han investigado sobre el Holocausto, pero ninguno es tan reconocido en este tema como León Poliakov.

El primer volumen de esta colección historiográfica fue traducido al francés y publicado por Gallimard en 1959. Sin embargo, esta obra provocó debate en Alemania, cuestionando la culpabilidad de los alemanes, mientras que pasó casi desapercibida en Francia. En 1971, Poliakov continuó y amplió su campo de investigación del antisemitismo al publicar El mito ario, en el que regresa a los mitos fundacionales de Europa.

Pero la obra de Poliakov no sólo está dedicada a la historia del genocidio y el antisemitismo. En 1981, publica sus memorias bajo el título El albergue de los músicos, que relata en particular su juventud y sus actividades de resistencia durante la guerra. Al mismo tiempo, a través de varias obras, volvió a la historia de Rusia, él que siempre había afirmado sentirse ruso por encima de todo.

Hoy en día, Poliakov sigue siendo más conocido por su trabajo sobre el antisemitismo, aunque su primera contribución a la historiografía de la Shoah también fue muy importante. Desde este punto de vista, puede parecer paradójico que en un momento en que esta historiografía pionera es objeto de numerosos trabajos, su trabajo sobre el tema siga siendo relativamente poco estudiado.

Sin lugar a dudas, su obra es de importancia vital dentro de la historia. Uno de sus trabajos más elogiados es Auschwitz: documentos y testimonios del genocidio nazi, en la que reveló por ejemplo que la esperanza de vida promedio en el campo de concentración en 1944 era de poco más de seis meses y que en 1943 no alcanzaba ni a cuatro. Asimismo, explica cómo dejaban morir a los judíos internados: se les obligaba a hacer trabajos forzados en un clima extremadamente frío, y la dieta que les asignaban no cubrían la porción de calorías que requerían para realizar dichos trabajos. Por otro lado, aquellos que eran calificados como “no aptos para el trabajo”, como niños, gente de la tercera edad o mujeres embarazadas, eran enviados de forma inmediata a las cámaras de gas.

En torno a dichas cámaras de gas, gracias a su estudio se sabe que los nazis usaron para asesinar, insecticida Zyklon B, un compuesto de cianuro que fue probado con prisioneros de guerra rusos desde septiembre de 1941.

Otro de sus libros destacados es La causalidad diabólica, en el que habla sobre las persecuciones que ha habido en la historia de la humanidad, y no sólo las que se refieren a los judíos, sino a todas las que se han realizado en contra de las minorías alrededor del mundo. Poliakov sostiene en esta obra que, en general, para las culturas mayoritarias, a lo largo de la historia, los grupos minoritarios representan la idea de lo diabólico.

Historia del antisemitismo es otro de sus trabajos más notables, ya que gracias a los cinco volúmenes de dicho título obtuvo el Premio Edmund Weil en 1960 y el Premio del Judaísmo Francés en 1981. Entre otras distinciones, destaca haber sido nombrado caballero de la Legión de Honor en 1989.

Fuente:

https://www.cairn.info/revue-archives-juives1-2016-1-page-134.htm

https://cdijum.mx/leon-poliakov-el-historiador-judio-por-excelencia/