Israel

Según un informe publicado por el diario egipcio Al Masry Al Yaoum, tres de los terroristas que realizaron los ataques el jueves pasado cerca de Eilat, eran ciudadanos egipcios miembros de una organización extremista islámica. 

Un reporte del periódico Haaretz informa que los atentados del jueves fueron producidos por 12 terroristas que se dividieron en cuatro células y éstas se dispersaron en un área de más de 10 kilómetros.

Varios de los terroristas flameaban con sus manos  pañuelos blancos para engañar a los conductores israelíes y de esta forma lograron  que se detengan. Se supo también que dispararon contra un helicóptero de la Fuerza Aérea israelí tratando de derribarlo y que algunos de los atacantes vestían uniformes como los que usa el Ejército egipcio. 

Al menos siete isrelíes fueron asesinados  y otros 25 resultaron heridos como consecuencia de tres ataques armados consecutivos registrados en el sur del país, en la carretera de Uvdat a Eilat. En posteriores enfrentamientos con soldados israelíes, siete terroristas fueron abatidos.

Los ataques comenzaron al mediodía cuando varios terroristas dispararon con ametralladoras, proyectiles de mortero y un misil antitanque contra vehículos privados y un autobús de la línea 392 de la empresa Egged a la altura del cruce Ein Netafim, a 30 kilometros al norte de Eilat.

El Ministerio de Defensa de Israel, aprobó la construcción de 277 viviendas en el asentamiento de Ariel en Cisjordania. No obstante, se mantiene la idea de que en cualquier negociación con los palestinos,  los grandes bloques de asentamientos continuarán bajo la soberanía israelí. 

Por cuarto sábado consecutivo, más de  70.000 personas se movilizaron en distintas ciudades de Israel, exeptuando Tel Aviv y Jerusalén  para pedir justicia social y para manifestarse contra los altos precios de la vivienda y el costo de vida en general. De esta forma los organizadores quisieron demostrar que la protesta es nacional, aunque se movilice una menor cantidad de gente.                                          

Las ciudades donde hubo una mayor cantidad de indignados en la calle fueron  Haifa, Beer Sheva y Afula. También en Netanya, Modin, Dimona, Eilat y Rishon Letzión se movilizaron aunque en menor escala. En todos los actos contaron con la participación de artistas y grupos musicales y con carteles que  pedían la liberación del soldado Guilad Shalit, cautivo en Gaza desde hace 5 años. 

En la ciudad de Haifa los manifestantes cantaban: «Haifa vuelve a ser roja», recordando los orígenes izquierdistas de la ciudad judeo-árabe y con mucha presencia obrera. Mientras que en Beer Sheva se movilizaron una gran cantidad de estudiantes y donde se podía leer un  cartel en castellano que decía: «Latinos del Neguev por la justicia social».