Crónicas neuquinas

La masacre del 7/10 y los debates entre la comunidad y la Universidad Nacional del Comahue

La Universidad Nacional del Comahue (UNCo), en su asamblea universitaria del mes de marzo, emitió una declaración “ante las acciones genocidas del gobierno sionista de Israel sobre la población palestina en Gaza y Cisjordania”. En esta nota, Rolando Schnaidler, coordinador de la Catedra Libre de Estudios Hebraicos “Baruj Spinoza”, de la misma casa de estudios, pone en contexto este pronunciamiento, realizando un recorrido por distintos acontecimientos que tuvieron como eje a diferentes actores de la comunidad judía, y a la UNCo, presentando una mirada compleja que procura evitar todo simplismo y maniqueísmo.
Por Rolando Schnaidler

Una extensa introducción

Hace algunos años ya, me había llamado la atención esa iniciativa que se fue instalando en las redes sociales “Un Baccari suelto en Israel”, como si se tratara de un extraño y novedoso etnógrafo que mira la sociedad israelí y la indaga, la intenta descubrir, pero en cuerpo presente, sin identificarse con la mirada turística simplemente, buceando en la experiencia apasionante de la búsqueda de sentido en cada práctica, en cada región, en cada universo de los símbolos de la sociedad israelí. Es decir, una mirada extraña que no es para nada lejana, y menos aún, académica. El encuentro con Andy Faur, publicado días después del ataque del 7 de octubre del 2023, fue especialmente apreciado por mí. La humildad de Andy haciendo centro en la movilización de la sociedad israelí para abrazar y contener a las víctimas de la incursión asesina del grupo terrorista Hamas, brindaba en ese momento la “otra mirada” sobre el conflicto, como lo fue también la visita de Andy a Moshé Rozen en la clínica donde se recuperaba de esa terrible experiencia.

Algo parecido a la mirada de “Un Baccari…” suele sucederme desde hace más de treinta años conviviendo, trabajando, amando y desamando, estudiando y caminando junto a y a veces a la distancia, con la sociedad neuquina. Es difícil hacer una síntesis de lo que se siente conviviendo lo cotidiano en esta provincia. La pujanza, la energía en permanente movimiento y una mirada muy instalada que recurre a la lógica (casi mussoliniana) que expresa: no importa la calidad de los gobiernos, de la industria, de los comercios o de los servicios de salud y educación (que, por cierto, las virtudes de estas actividades son mérito, muchas veces, de médicos/as y educadores/as en el contexto de crisis permanente), lo importante es que sea neuquino. Esta lógica configura una manera de ejercer la política provincial, y en el medio de ese escenario emerge la Universidad Nacional del Comahue, desde el año 1972 como iniciativa pensada por neuquinos e impulsada por el Movimiento Popular Neuquino (MPN), y regionalizada posteriormente con alcances (sedes) que incluyen la provincia de Rio Negro. Un lugar de formación y producción de conocimiento que sabe de su necesaria correspondencia con el gobierno provincial (MPN) pero que a su vez sostiene una modalidad independiente en sus acciones, resoluciones, nombramientos, de los cuales muchos neuquinos y neuquinas se enorgullecen. Un estilo “rebelde” en sus prácticas, que incluyen a estudiantes y gestión conjunta y los llamados “no docentes”, que integran también el gobierno universitario. Una institución rebelde en sus iniciativas de Extensión e Investigación, enunciados permanentes de reclamo por los derechos de las minorías y culturas originarias, una identidad que se hace visible en las movilizaciones y pronunciamientos a nivel regional y nacional.

Otra institución protagonista del relato que intento introducir es el Centro Hebraico de Neuquén (CEHN), que surge en la década del 80 como un desprendimiento (en disidencia) con la “Comunidad Judía del Alto Valle de Rio Negro y Neuquén”, con sede en la ciudad de Cipolletti (muy cercana a la ciudad de Neuquén), comunidad que reconoce con dificultad, la entidad del CEHN en la región.

La Comunidad Judía de Neuquén adhiere al judaísmo laico y progresista, con principios de inclusión e integración comunitaria, y muchos detalles más, como por ejemplo haber mantenido sus miembros fundadores, relaciones muy cálidas y cercanas con el ya fallecido “Obispo Don Jaime” (De Nevares), emblema de la defensa de los derechos humanos en la región. Y más aún, una diversa y dinámica comunidad, pequeña, pero siempre presente en las convocatorias más relevantes de la vida judía.

Leonardo Senkman en la Facultad de Ciencias de la Educación de la UNCo, en 2014. Con Rolando Schnaidler.

Existe un tercer actor en esta trama, que en este caso, la Catedra Libre de Estudios Hebraicos “Baruj Spinoza”, de la cual soy su coordinador académico, que desarrolla su tarea en el seno de la Facultad de Humanidades de la UNCo desde hace más de quince años[i], con infinidad de propuestas académicas y que sustenta un único propósito: “fomentar el estudio de la cultura judía”, una cátedra libre fundada a propuesta de parte de los socios fundadores del CEHN, con dos grandes representantes en su lista, uno con una enorme impronta comunitaria, el Lic. Carlos Gotlip y otro, con relevancia académica internacional, el Dr. Leonardo Senkman.

Especial responsabilidad es la de llevar adelante esta tarea, con figuras de tamaña presencia y, además, en un clima de mucha disputa por el sentido de nuestras acciones y el de otra cátedra libre, en este caso de estudios Palestinos, “Edward Said”, que también funciona en el seno de la Facultad de Humanidades. La disputa de sentidos tiene que ver con el objetivo manifiesto de cada una de las cátedras: mientras la cátedra “Edward Said” centra su tarea en la lucha por el reconocimiento histórico y territorial del Pueblo Palestino, nuestra propuesta académica lo hace dentro del marco histórico, filosófico y espiritual, cultural, del Pueblo Judío. Es así en la práctica concreta y, al menos desde nuestras iniciativas académicas, nunca renunciamos a nuestro propósito fundacional.

Un pequeño alto y referencia en el relato ayudaría a entender esta dinámica:

En el año 2014, el Dr. Senkman fue invitado por la Cátedra Libre “Baruj Spinoza” a realizar una serie de actividades en la Universidad Nacional del Comahue, basado en una propuesta académica con formato de “conversatorios” sobre el tema “Identidades colectivas y el ser Nacional. La integración de los judíos en la Argentina”.

Los conversatorios tenían sede en la Facultad de Humanidades y la Facultad de Ciencias de la Educación. Pero en la FAHU (Facultad de Humanidades) no se pudieron concretar, el Consejo Directivo prohibió su realización en esa sede (por mayoría) poniendo en práctica el llamado Boicot, Desinversiones y Sanciones (BDS) a solicitud de grupos políticos en apoyo a la causa palestina. El argumento “casero” era el siguiente: el Dr. Senkman (docente de la Universidad Hebrea de Jerusalem, Israel) es representante del Estado de Israel y debemos condenar su presencia en esta casa de estudios. Los debates suscitados y nuestro pedido de explicaciones a ese Consejo Directivo dieron cuenta de las “internas” políticas en la FAHU, las voces intransigentes de los sectores ubicados a la izquierda docente y estudiantil lideraron el rechazo. La actividad se realizó igualmente en la sede la FACE (Facultad de Ciencias de la Educación). Es importante destacar (sirve para el relato posterior) que en ningún momento sufrimos agresiones de tipo antisemita o de segregación en la FAHU, habíamos realizado actividades anteriores y posteriores (es muy destacado el curso de Posgrado dictado por la Dra. Sperling en el año 2023) sin ningún tipo de problemas. En ese caso, era una solicitud puntual, aplicar el principio del Movimiento “BDS” a esta propuesta académica.

Actividad con Leo Senkman en 2014.

Azorado presencié e intenté rebatir los argumentos del debate, siendo el Dr. Senkman (de origen argentino y quien vive en el Estado de Israel desde el año 1984), estudioso de los procesos históricos en la conformación de identidades colectivas, entre otras indagaciones realizadas, fruto de los procesos de exilio y destierro que ha producido el siglo XX, del cual él será protagonista en la Argentina entre los años 1976 y 1983, y que luego compilará en una edición del “Centro Editor de América latina” en un estudio sobre el Antisemitismo en la Argentina (1986) donde participará el escritor Ismael Viñas, uno de los exiliados en el año 1976, después del golpe cívico, eclesiástico y militar. Particularmente recuerdo haber introducido este comentario en las deliberaciones con los consejeros/as, intentando avanzar en lugares de acuerdo en la identificación de nuestros rivales comunes, y la respuesta fue el silencio. No existía la posibilidad de asociar la figura del Dr. Senkman a los hermanos Viñas, y menos aún a comportamientos y acciones progresistas.

El “contorno” del relato

Podría iniciar este trayecto, utilizando una palabra más afín a lo que se espera de un relato, pero elijo “contorno”, el título de la revista publicada entre los años 1953 y 1959 por los hermanos Viñas (Ismael y David)[ii].

En el año 2023, durante el mes de abril, se organizó una actividad de posgrado, coordinada por la Cátedra “Baruj Spinoza”, dictada por la Dra. Diana Sperling y con un apoyo profesional, de medios de difusión y organizativos por parte de la FAHU y su Secretaría de Posgrado, que podemos calificar como “impecables” en todas las dimensiones analizables. Luego, en uno de los mensajes de amplia difusión que promueve Meretz en las redes sociales aparece un programa que contiene actividades presenciales y virtuales solventadas económicamente por Meretz Argentina y que permite a comunidades judías del interior del país, acceder a capacitaciones, encuentros de debate y esclarecimiento acerca de los acontecimientos actuales de la sociedad israelí y la comunidad judía en general. La Cátedra “Baruj Spinoza” en conjunto con el CEHN, solicitó la presencia de Meretz en nuestra región, esa visita fue coordinada por Kevin Levin y Adriana Potel. La agenda era realmente apasionante: presencia en los medios públicos haciendo referencia a las protestas y movilizaciones que realizaba masivamente la sociedad civil israelí en contra de la reforma judicial que impulsaba el gobierno de Benjamin Netanyahu, y además, contábamos con la presencia de una representante del grupo “Mujeres activan por la paz” (WWP), Adriana Potel, que entre otras propuestas, organizó un encuentro con estudiantes de la Facultad de Ciencias de la Educación (UNCo) para conversar acerca de la situación de los/as niños/as desplazados por la guerra ucraniano-rusa, en la frontera con Polonia, y la tarea realizada por jóvenes judíos/as en ese marco.

Entre los días 5 y 6 de octubre del 2023 estuvimos activamente participando de esas actividades. El día 7 de octubre, con los visitantes todavía en Neuquén, cambió todo.

La asamblea universitaria

A la asamblea universitaria llegaremos en un contexto totalmente diferente, el avance israelí sobre Gaza coincidió con las protestas organizadas, la presencia de banderas palestinas en marchas de agrupaciones diversas, con reclamos claros a la política nacional y una concurrencia difícil de advertir en concentraciones populares en otros momentos históricos de la Provincia de Neuquén. El reclamo incansable a las políticas recientemente implementadas por el nuevo gobierno y la denuncia a la incursión israelí en la Franja de Gaza, todo junto.

Kevin Ary Levin y Valeria Levin en la Comunidad Judía de Neuquén.

El 12 y 13 de marzo de 2024 se realiza la asamblea universitaria de la UNCo. Fue un hito histórico en el cual, luego de muchos años, se decidirían aspectos fundamentales de la actividad universitaria para los próximos años. Consejeros/as directivos/as, consejeros/as superiores, estudiantes, graduados/as, no docentes y decanos/as participaron de ese evento, en un salón especialmente adecuado, ya que la cantidad de personas acreditadas era un número histórico, casi 300 representantes, entre los/as cuales estuve incluido, se debatieron proyectos de modificación y creación de carreras, normativas de funcionamiento, reglamentaciones y la toma de decisiones estratégicas y estructurales.

Entre el conjunto de declaraciones presentadas, me centro en una en particular, la de un conjunto de estudiantes que condenaba explícitamente el accionar de la fuerzas armadas israelíes en la franja de Gaza -agregando consideraciones sobre el asedio israelí a las poblaciones palestinas desde el año 2008, a las ayudas humanitarias, y la presión que, argumentan, busca la destrucción de la población palestina- y que en su párrafo final declara: “Se adhiere a la solicitud para que las organizaciones internacionales instruyan y establezcan las acciones pertinentes para enjuiciar al Estado Sionista de Israel como perpetrador de un genocidio planificado.” (Dec. 0001/24 Consejo Superior – UNCo).

Las Declaraciones se presentaron al comienzo de la Asamblea y como es sabido, se inician las negociaciones para acordar, rechazar o bien redactar un comunicado que condense diferentes posiciones. Los pasillos se pusieron frenéticos y los cafés circulaban de manera incesante en el primer cuarto intermedio. Mi posición fue expresada, en los pasillos, inmediatamente: “podemos consensuar una declaración que repudie el ataque criminal del Grupo Hamas, indiscriminado y especialmente perpetrado a mujeres, ancianos y niños/as el 7 de octubre de 2023”. Sabía perfectamente que aceptar el resto de los términos era el inicio de un debate más en el seno de mi comunidad. Pero mi estrategia, pobre y apresurada, era simplemente poner en la agenda del debate posterior, los acontecimientos del 7 de octubre de 2023 sin intentar justificar la respuesta israelí, aunque reconocía y lo expuse en mi intervención final, que existían errores históricos en las consideraciones de la nota original (que incluía otros hechos adjudicados al Estado de Israel desde el año 1948). No hubo negociación posible, pero sí mucha escucha en grupos de estudiantes y docentes, con debates similares a los que experimenté en mi paso por la escuela pública: “si hay una guerra entre Israel y Argentina, ¿para qué país vas a pelear vos?”; en este caso un ejemplo de esas reflexiones era: “¿no era que El Estado de Israel financiaba al grupo Hamas y permitieron el ataque para luego iniciar una represión brutal?”. Se hacían difíciles los debates.

Perdí en esas negociaciones y finalmente la declaración presentada en la Asamblea, fue aprobada por mayoría. Pero varios grupos votaron por la negativa o se abstuvieron o, como fue el caso de los/as estudiantes de mi Facultad, que se retiraron antes de la votación.

Varias lecturas son posibles de este evento. Por ejemplo, la Facultad de Lenguas -que era una de las unidades académicas que propiciaba la inclusión del idioma Mapuche en sus programas- votó masivamente en contra de la declaración, una agrupación de estudiantes feministas también, integrantes del Centro Regional Universitario Bariloche (CRUB) contó con varias abstenciones, además de algunos/as decanos/as.

Actividad con Diana Sperling en el año 2023.

La preocupación de la dirigencia de mi comunidad no se hizo esperar y se iniciaron las consultas con la DAIA. Y la DAIA no tardó en responder, “esta es una clara acción antisemita”.

Finalmente, la DAIA pidió una reunión urgente con el rectorado de la UNCo. Y se encontraron junto a otras personalidades comunitarias locales para debatir el tema, los acontecimientos de esa reunión pueden ser parte especial de otra construcción escrita, que debería incluir la nueva y reciente visita de Meretz a la región y un encuentro especialmente enriquecedor con estudiantes de la Facultad de Ciencias de la Educación y el Decano de la FAHU, con quien pudimos pensar acciones futuras y conjuntas.

Un cierre que se proyecta

El centro de todos estos relatos es la posibilidad de mirar la tarea de la Cátedra Libre de Estudios Hebraicos “Baruj Spinoza” y una difícil situación política y académica. Inserta en un tablero de relaciones que alterna contradicciones, falta de comprensión, arrebatos del poder, y, con todo ello, sostener un mensaje claro: “Difundir cultura judía”. Cada obstáculo permite una nueva estrategia de comunicación y debate con la comunidad Neuquina (y la comunidad judía Neuquina y del Alto valle de Rio Negro).

El otro aspecto de análisis y cierre es más complejo:

¿Podemos establecer un diagnóstico tan preciso y afirmar la adhesión masiva de un gobierno universitario, sus estudiantes, docentes y no docentes a posturas antisemitas?

Al observar detenidamente los acontecimientos relatados, desde el primer debate producido por la llegada del Dr. Senkman, la cantidad de actividades realizadas en casi diez años consecutivos, el posterior acompañamiento que recibe la Cátedra “Baruj Spinoza” con la llegada de la Dra. Sperling y la inmediata visita de Meretz y la WWP, es posible advertir diferencias en las lecturas y visiones políticas de las experiencias relatadas.

Evaluar estos acontecimientos es una invitación a pensar y profundizar los diálogos dentro de nuestra propia comunidad y a la vez con las instituciones con las cuales realizamos tareas de tipo académicas, de debate, de docencia, de interacción social.

Tiendo a pensar que es mejor no radicalizar posturas como hicieron aquellos estudiantes y docentes votando contra la llegada de un académico argentino (de tamaña envergadura), que decide vivir en Israel. Ni tampoco definir taxativamente las acciones democráticas de un órgano universitario (la Asamblea) como un ámbito de pensamiento excluyentemente antisemita y a partir de allí expresar posiciones concluyentes.

No   es posible para mi sentenciar de manera definitiva que las reacciones de pequeños grupos políticos universitarios son manifestaciones antisemitas, aun cuando algunas organizaciones centrales de la vida judía a nivel nacional lo interpreten con un único formato. Es claro que estamos inmersos/as en un entramado que toma cuerpo en el dolor de la comunidad judía local, al ver que una institución tan querida en la Provincia de Neuquén aprueba los términos de este tipo de declaraciones (ya analizadas en el presente artículo), y como contrapartida, se encuentra sitiada en un campo intermedio en el que se producen invitaciones a la confrontación, desde una perspectiva que desconoce los contextos locales.


[i] Algunas de las actividades realizadas contaron con los/as siguientes invitados/as especiales. Es posible notar en el listado presentado, la diversidad de posturas, trayectorias académicas y pertenencias dentro del mundo judío. Desde el año 2009 en adelante recibimos a los siguientes académicos de reconocida trayectoria: Dr. Yosi Goldstein, Dr. Javier Simonovich, Dr. Leonardo Senkman (en más de tres oportunidades), Prof. Angela Waksman, Dr. Arie Kracowicz, Dr. Julián Schvilderman, Mg. Gustavo Efron, Dr. Gustavo Perednick, Lic. Ariel Dorfman, Dra. Diana Sperling, Prof. Valeria Levin, Mg. Kevin Levin (en más de dos oportunidades).

[ii] Revista editada entre los años 1953 y 1959 dedicada a la crítica literaria, pero con alcance a reflexiones filosóficas y políticas que la hicieron emblema de la intelectualidad vanguardista de ese momento. Junto a los hermanos Viñas, colaboraron: Noé Jitrik, León Rozitchner, Rodolfo Kusch, ente otros/as pensadores/as de la época.