Las primeras obras literarias sobre la masacre del 7 de octubre comenzaron a difundirse en las semanas posteriores al suceso en redes sociales. Acorde a la época que vivimos y a la necesidad de expresar el dolor y el estupor por lo sucedido, esta “literatura relámpago” se fue difundiendo no solo en las redes, sino en periódicos y revistas. Mayoritariamente fueron poemas y microrrelatos que intentaron comenzar a poner el horror en palabras.
El poeta Tzur Güeta escribió en Oscuridad sobre la faz del abismo:
La maestra Mijal nos preguntó: / “¿Quién puede aquí decirme qué significa el versículo / ´La tierra era un caos / y la oscuridad sobre la faz del abismo´?”. // Todos estos años, desde entonces y hasta hoy, / resonó esa pregunta en mi interior, resonaron en mí / los ojos de la maestra buscando una mano levantada, / resonó en mí ese silencio atronador. // El 7 de octubre resonó el timbre de teléfono / en la casa silenciosa de la maestra Mijal. / “Soy yo”, dije, “he aquí el caos, / he aquí la oscuridad, he aquí el abismo. Shalom”.
Orly Gutman escribió en Zonas temporales:
Hoy y ayer están separados / por un día. / Ayer y anteayer están separados / por un día. / El 7 de octubre / y el 6 de octubre / están separados / por un abismo. / Y fue la tarde y fue la mañana, / el infierno.
Ambos poemas aluden a los primeros versículos del Libro de Génesis, se refieren al caos reinante antes de la creación del mundo y hacen un paralelismo con el desorden, la confusión y la anarquía que caracterizó al “sábado negro” y a los días posteriores.
Alex Epstein dice en su microrrelato Disculpas:
“En la sección semanal del horóscopo publicada el 6 de octubre se produjeron numerosos errores en todos los signos del zodíaco. Les pedimos perdón”.
Desde otro enfoque, este autor trata el tema con aparente liviandad, como si los hechos hubieran tenido que ver con la astrología, como si no hubiera habido detrás de ellos decisiones políticas y militares.
De la escritura relámpago a la memoria colectiva
Con el correr de los meses, el pueblo del libro necesitó la palabra para tratar de entender lo sucedido y elaborar el trauma personal y colectivo. En el informe 2024 presentado por la Biblioteca Nacional de Israel en junio de 2025, con motivo de celebrarse “La semana del libro”, se notifica la publicación de 548 libros que tratan la masacre del 7 de octubre y la guerra posterior. Los libros abordan diferentes temáticas en todos los géneros literarios. Nos referiremos a algunos de ellos.

En primer lugar, se publicaron numerosos libros que recogen testimonios individuales sobre lo vivido por diferentes personas y en diferentes puntos geográficos durante ese día: crónicas de individuos que hacen su aporte a la construcción de la memoria colectiva y a quienes la prosa testimonial puede ayudar a elaborar el trauma. Entre ellos hay muchos relatos de héroes anónimos civiles, a diferencia de guerras pasadas en las que el heroísmo era patrimonio de los soldados.
En el género historieta también se publicaron relatos de heroísmo individual y sobre víctimas (El día en el que todo cambió: 10 relatos del 7 de octubre), el relato de cautiverio de Shiri Albag, una soldada liberada en enero de 2025, después de 477 días; En el corazón del 7 de octubre, relatos ilustrados de los más importantes historietistas de Israel que logran expresar sentimientos, información y temores de quienes vivieron ese día maldito.
Un libro de género inclasificable es El 7 de octubre, compilado por Tal Chaika, que recopila mensajes y publicaciones de víctimas en las redes sociales durante ese día. Se puede afirmar que allí están las últimas palabras de quienes no sobrevivieron al ataque, los pedidos de ayuda que enviaron y los mensajes finales a sus seres queridos.
Otro género que aportó muchas publicaciones fue el ensayo: análisis sobre la influencia del ataque en el país en general y sobre los ciudadanos en particular, investigaciones sobre Hamas, Netanyahu, política en Medio Oriente, judaísmo y antisemitismo en el mundo.
En contraposición con la frase de Theodor Adorno, “Escribir poesía después de Auschwitz es un acto de barbarie”, se publicaron numerosos poemarios sobre la masacre a lo largo de 2024. El poeta Abraham Sharon, autor de Permitido comunicar: 7.10.2023, declaró que durante las semanas posteriores no pudo escribir nada, pero al tiempo se dijo a sí mismo que debía atreverse a escribir aquello que era imposible escribir. Y así nacieron sus poemas. Escribe al respecto en Lo opuesto a la barbarie: “Después de todo, / debe ser creada una nueva lengua. / Cosas imposibles de describir / en las palabras que una lengua humana permite”.
Si bien no hay todavía muchas publicaciones sobre los secuestrados (posiblemente porque esa no es una cuestión resuelta), cabe destacar el libro Secuestrado, de Eli Sharabi (junio de 2025), quien estuvo cautivo durante 491 días. Esta autobiografía tuvo una gran repercusión y se vendieron 70.000 ejemplares en dos meses.
Una referencia especial son los 60 libros infantiles publicados sobre el 7 de octubre. Los temas son muy variados y abarcan diferentes situaciones que niños israelíes vivieron y viven a partir de esa fecha: cuentos breves con ilustraciones sobre gente común que atravesó situaciones extraordinarias, las alarmas, los refugios, las pérdidas, la muerte, los padres que son movilizados para la reserva, los evacuados, etc. Una guerra de héroes, de Hadasa Ben Ari, (publicado en mayo 2024) está dedicado a niños de entre 9 y 12 años, incluye un instructivo para adultos y está disponible en: https://www.giborim-kids.com .
Finalmente, el único libro traducido al español hasta el momento es Habitación sin vistas: diario de guerra en Tel Aviv (Ed. Anagrama, 2025), de Dror Mishani, un reconocido escritor de policiales que narra, en forma de diario, los días posteriores al ataque desde su vivencia particular: la inseguridad, la incertidumbre, el estupor… Y además reflexiona sobre la situación y sobre el heroísmo, el activismo y la acción, a la vez que busca consuelo en la literatura.
Se han escrito hasta ahora numerosos libros sobre este tema, pero este es apenas el comienzo. Seguramente la perspectiva del tiempo aportará miradas y pensamientos nuevos en el futuro y se publicarán muchos otros libros más. El poeta Abraham Sharon, antes citado, finaliza su poema así: “Con los años / será creada una lengua aún no creada. / Porque no será posible contener todo, … / Será necesario describir el horror / en palabras. / Antes que la locura devore / los restos de cordura”.
 
								 
															